BLOG

Créditos Personales

julio 14, 2020

Un crédito personal es una herramienta muy útil a la hora de planificar una remodelación en la casa, estudiar, armar un viaje, emprender una unidad de negocios o simplemente ordenar tus finanzas. Hay numerosas opciones de préstamos personales online a disposición. Utilizando los simuladores ofrecidos se puede definir el monto y el plazo conveniente para saber el monto real otorgado y el interés a pagar, entre otras cosas.

Para solicitar un préstamo en un banco en general hay que ser cliente del mismo, pudiendo acceder así al banking online o incluso desde alguna red de cajeros. Habitualmente se pueden gestionar en cualquier momento del día y cuentan con acreditación automática. En caso de no contar con un préstamo personal preaprobado, el otorgamiento del crédito solicitado será evaluado por un equipo técnico del banco. El plazo de rechazo o aceptación puede durar hasta treinta días luego de entregada la documentación necesaria.

El interés a pagar por el crédito dependerá de las tasas del mismo, las cuales se pueden calcular con un simulador online. La precancelación de cuotas o la cancelación anticipada del préstamo suele ser una posibilidad. Puede haber una comisión por dicha acción, aunque puede no haberla según el caso (una posibilidad es que haya pasado un cuarto del plazo original de financiación, por ejemplo). Los montos disponibles para los créditos personales dependen del banco o entidad financiera.

El sistema de amortización para los préstamos utilizado habitualmente es el conocido como “francés”: indica que la cuota pura (la cual está compuesta por el capital más el interés) es siempre igual durante toda la vida del préstamo.

En los préstamos que tributen IVA (impuesto al valor agregado), el valor de dicho impuesto irá disminuyendo con el pasar de cada cuota por lo que la misma será decreciente.

En el caso de los créditos personales bancarios, la cuota se paga a través del débito automático en la cuenta que posea el beneficiario en el banco.

Una cuestión habitual en este tipo de créditos es el impuesto al sello: es un tributo que alcanza, entre otras, a las operaciones de préstamo de dinero. Una vez otorgada el alta del préstamo a través de alguna de las sucursales del banco, el mismo retiene el impuesto al inicio, deduciéndolo del monto total acordado. En caso de haber solicitado el préstamo online, el impuesto se retiene en cada cuota a pagar.

Solicitar Prestamo