Pagar un préstamo más rápido puede ser una gran forma de aliviar la carga de la deuda y ahorrar dinero a largo plazo. Si se ponen en práctica algunas estrategias, se puede reducir la cantidad de tiempo que se tardará en pagar el préstamo y reducir la cantidad total de intereses a pagar. Esto es importante dado que cualquier cantidad adicional a pagar en un préstamo, por menor que sea, representará un valor significativo en el largo plazo.
Hay una serie de variantes a implementar. Algunas no dejan de ser efectivas por más obvias que sean. Por ejemplo, aumentar los pagos mensuales. La forma más sencilla de pagar un préstamo más rápido es haciendo pagos mensuales más grandes. Si se tiene un poco más de dinero disponible en el presupuesto mensual, se puede intentar hacer pagos adicionales en el préstamo. Esto puede reducir significativamente la cantidad de tiempo que se tardará en pagar y la cantidad total de intereses a pagar.
También se puede pagar más a menudo. En lugar de hacer un pago mensual grande, se puede hacer pagos más pequeños con mayor frecuencia. Por ejemplo, en lugar de hacer un pago de $500 cada mes, establecer dos pagos de $250 cada quince días. Esto reducirá el monto del interés que acumula el préstamo y, al hacer pagos más frecuentes, el préstamo se pagará más rápido (si el tipo de interés y préstamo lo permiten). Todo ingreso extra puede ser destinado a hacer pagos adicionales. Una bonificación en el trabajo, un reembolso de impuestos o cualquier otro ingreso puede ser considerado para hacer un pago adicional del préstamo. Esto puede ayudar a reducir el capital del préstamo y, por lo tanto, reducir la cantidad de intereses a pagar.
Otro ingreso para dichos pagos puede originarse en reducir los gastos innecesarios. Si el objetivo es pagar un préstamo más rápido, reducir los gastos innecesarios en el presupuesto (tales como comer fuera, entretenimiento, compras impulsivas y otros gastos superfluos) pueden permitir ahorrar dinero y aplicarlo al pago de la deuda.
Una opción sencilla y a la vez difícil de llevar a la práctica es buscar formas de aumentar los ingresos. Al buscar maneras de aumentarlos (incluyendo trabajar horas extras, buscar un trabajo adicional de medio tiempo, o incluso vender artículos que no estén en uso), pueden aplicarse los ingresos extra directamente al préstamo. El objetivo es reducir la cantidad de intereses a pagar y acelerar el pago del préstamo.
Por último, se puede considerar refinanciar el préstamo. Si la tasa de interés es alta, se puede refinanciar con una tasa de interés más baja. Esto puede reducir la cantidad de intereses a pagar cada mes y, por lo tanto, cancelar el préstamo más rápido.