Necesitamos efectivo para llevar adelante un proyecto personal y queremos pedir un préstamo pero no sabemos por dónde empezar. A continuación veremos un paso a paso de cómo proceder:
Elegir la entidad con la que trabajaremos
Para poder optar por la mejor opción, debemos asesorarnos sobre los distintos tipos de préstamos personales y sus intereses. En nuestro país podemos conseguir préstamos tanto de instituciones bancarias como financieras. Sea cual sea la opción que optemos, es importante que evacuemos todas las dudas que nos surgieron con el asesor de la entidad.
Una vez que estamos seguros de que queremos el efectivo y ya sabemos con qué entidad vamos a trabajar, debemos asegurarnos de que podemos cumplir con todos los requisitos documentales que solicitan.
Requisitos
Quizás parezca un obviedad, pero el primer requisito importante para poder solicitar un préstamo personal es ser mayor de edad. Dependiendo de la cantidad de dinero solicitado, puede ser que No nos soliciten documentación complementaria. Sin embargo, debemos estar atentos que nos pueden llegar a pedirnos alguno de los siguientes documentos:
- Documento de identidad.
- Comprobante de ingresos (si es trabajador en relación de dependencia, van a ser los últimos recibos de sueldo. Si se es trabajador autónomo, la declaración de ganancias, declaración del IVA y pago de autónomos de la Seguridad Social o cualquier otro documento que de una pauta de lo que se gana)
- Copia del contrato de trabajo.
- Relación de su patrimonio en el momento de solicitar el préstamo (inmuebles en propiedad, coches, inversiones, cuentas bancarias, etc.)
- Garantía: Escritura de la vivienda por ejemplo. Hay documentación que es opcional según la institución con la que quiera trabajar: Recibos de pago (luz, gas, teléfono, alquiler, etc.). Últimos recibos de otros préstamos, si los tuviera Presupuesto o factura pro forma del producto o servicio que desea adquirir con el préstamo
Una vez presentada toda la documentación, la entidad financiera va a enviar su legajo para ser calificado y allí determinarán si usted puede ser acreedor del préstamo y, de ser así, por cuánto efectivo.
Formalización
Finalmente, el préstamo se formaliza mediante la firma de una póliza. Es un acto formal, con repercusiones judiciales, en el que la entidad y el prestatario se comprometen a cumplir todas las condiciones de la operación. Muchas veces puede ser que se pida que el contrato esté certificado, gasto que correrá por cuenta del cliente.
En algunas ocasiones puede ser indicado contratar un seguro de protección de pagos, que asegura la amortización, total o parcial, del préstamo en caso de que ocurra algo al titular asegurado (fallecimiento, incapacidad, paro prolongado…)
Como podemos ver, solicitar un préstamo es un trámite rápido y fácil que nos otorgará el dinero necesario para poder seguir adelante con nuestros proyectos personales.